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Por Amnellys Rivera
Ellen DeGeneres, nació el 26 de enero de 1958 en Nueva Orleans, Louisiana. Su padre, Elliot era vendedor de seguros y su madre Betty, una agente de bienes raíces de descendencia francesa, inglesa, alemana e irlandesa.
Tiene un hermano conocido por sus intervenciones como Mr. Bill en el famoso show “Saturday Night Live” y creció bajo el cinturón del cristianismo hasta que sus padres se divorciaron, por lo que se alejó de la religión. De ahí en adelante vivió tiempos duros y las mudanzas junto a su madre fueron constantes.
La “show woman” de la televisión norteamericana
Y, a mal tiempo buena cara, refrán que ha aplicado a su vida, lo que la hacía destacarse como la chica más divertida de la clase. Se matriculó en la universidad, pero sus ganas de ser independiente la hicieron trabajar como secretaria en un bufete de abogados, en una tienda de ropa, como camarera, vendedora a domicilio y bailarina. Las fiestas entre amigos fueron los primeros escenarios de Ellen, quien pasó más tarde a recorrer los Estados Unidos realizando números cómicos.
En 1982, fue elegida por HBO como la persona más graciosa de América y empezó a participar en los shows televisivos de Jay Leno, Letteman y Oprah Winfrey, entre otros. Su carrera despegó e intervino en varias series de televisión como “Open House” y “Roseanne”.
Fue en 1994 cuando el público americano se rindió ante Degeneres gracias a la serie Ellen, una comedia en la que era protagonista y que fue cancelada pero regresó con The Ellen DeGeneres Show, el cual ha ganado 15 premios Emmy como mejor talk show, algo sin precedentes. Fue presentadora de los Emmy en dos ocasiones y de los Oscar en varias, dejando una buena impresión ante los críticos.
A DeGeneres se le conoce por bailar con sus invitados al principio del programa. ¿Quién no recuerda cuando esta puso a bailar al presidente Barack Obama?
Algunos la recordarán por haber dado voz a Dori en Finding Nemo, pero otros jamás la olvidarán por sus escenas lésbicas junto a Sharon Stone en el drama If These Walls Could Talk 2, actuación que seguramente disfrutó mucho.
Entre otros créditos cinematográficos se incluyen: EDTV, The Love Letter, y Mr. Wrong.
Su talento y fuerza le abrieron paso en un ámbito difícil para la mujer, como ser hoy en día la presentadora más valorada en Estados Unidos.
Ellen “DEGENERADA”
“Soy lesbiana, acuario y vegetariana”. Todavía en 1996, muchas lesbianas en el mundo del espectáculo permanecían viviendo en el anonimato. Esto cambió cuando Ellen DeGeneres logró un hito confesando que era gay en su serie, Elle la cual ABC posteriormente canceló, tras su revelación.
La carrera de DeGeneres estuvo a punto de naufragar tras su salida del closet, debido quizá a cierta homofobia latente, lo que le costó varios años para volver a restablecerse como presentadora.
Algo parecido sucedió con su novia en aquel entonces, la también actriz Anne Heche, quien dejó de recibir propuestas para realizar películas. La relación de DeGeneres con la actriz se convirtió en el objetivo de la prensa.
Finalmente, Heche rompió con la presentadora y se casó con un hombre. Antes de declararse gay públicamente, Ellen tenía una novia que falleció en un accidente de tránsito, y lejos de hundirse, se replanteó la vida que llevaba en ese momento y terminó escribiendo su primer monólogo Phone Call to God , que trataba sobre la muerte de su compañera y que utilizó en su primer trabajo público como humorista.
Entonces, mantuvo una relación con la actriz, directora y fotógrafa Alexandra Hedison. Y después conoció a la actriz Portia de Rossi, con quien se casó en una ceremonia privada y sobre todo por “el tabú”, muy criticada.
Luego de esta confesión, el telepredicador Jerry Falwell la llamó “Ellen DeGenerada”, comentario que llegó a tener mucha trascendencia en el país. A lo que esta respondió: “Vaya, ¿me llamó así de verdad? ¿Ellen DeGenerada? Lo llevo oyendo desde que estaba en cuarto de primaria”.
No obstante, comenzó a sentir el alejamiento de muchos. Pero esta valiente rubia, no se quedó atrás, no se dio al alcohol ni las drogas, y continuó con lo que mejor sabe hacer, monólogos increíblemente dinámicos, ingeniosos y divertidos.
Para muchos, Ellen Degeneres, no es una" lesbiana famosa" fuera del armario, sino un modelo como mujer, por su talento, inteligencia, profesionalidad, valor y tesón. Lleva décadas hablando de su lesbianismo con libertad, normalidad y, muchas veces, con un gran sentido del humor.
Para muestra, varios botones: En 2001, un par de meses después de los atentados del 911, presentó la gala de los Emmy en la que dijo: "Se nos dice que sigamos con nuestra vida como siempre, porque no hacerlo sería dejar que ganaran los terroristas y, en verdad, ¿qué podría alterar más a un talibán que una lesbiana de traje frente a una sala llena de judíos?"
Con su simbólico pelo corto y rubio es sin duda la Sienfield femenina, la lesbiana desarmarizada más influyente de los Estados Unidos y la más famosa a nivel mundial actualmente. "Ya saben cómo soy, cualquier excusa para ponerme un traje”. Así es Ellen Degeneres.
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