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El Sierra Club y una coalición en aumento de aliados locales, regionales y nacionales anunció hoy el retiro de la planta de combustión carbón número 150 —un significativo hito en la campaña de abandono completo del carbón para el año 2030. Con el anunció de hoy de que la Brayton Point Power Station en Massachusetts se retirará para 2017, la campaña Más Allá del Carbón del Sierra Club ha llegado al número 150 de instalaciones carboneras jubiladas desde 2010.
Según la Clean Air Task Force, retirar 150 plantas de carbón ayudará anualmente a salvar las vidas de 4,000 personas, evitar 6,200 ataques al corazón y prevenir 66,300 ataques de asma. Además nos ahorrará a todos unos $1,900 millones en costos de salud.
El Sierra Club ha hecho público el anuncio por medio de un video en YouTube del grupo Nico Vega
“La clausura de la planta de la Brayton Point Power Station es un poderoso ejemplo de cómo el activismo local puede tener un impacto global”, dijo Michael R. Bloomberg, filántropo y alcalde de Nueva York. “Durante los últimos tres años, el activismo de comunidades locales —en cooperación con el Sierra Club y Bloomberg Philanthropies— ha provocado la clausura de 150 plantas de carbón, una tras otra. Seguiremos apoyando a quienes trabajan localmente en todo el país para clausurar las sucias plantas de carbón, las cuales causan la muerte de 13,000 personas cada año y amenazan el futuro del planeta”.
“Planta tras planta, comunidad tras comunidad, no sólo estamos reduciendo la contaminación de carbono en nuestro país, sino también estamos salvando vidas”, dijo Michael Brune, director ejecutivo del Sierra Club. “Abandonando el sucio y peligroso carbón, estamos creando nuevas oportunidades para la energía limpia y miles de empleos que protegen a nuestros trabajadores y a la salud pública. La transición del carbón a la energía limpia transformará nuestra economía estableciendo un nuevo y enorme sector que alimentará de energía a nuestras comunidades sin envenenar a nuestros hijos”.
“Nuestra coalición de grupos medioambientales, conservacionistas, de salud pública y derechos civiles ha logrado un hito que pocos creían que fuera posible”, dijo Verena Owen, una veterana líder comunitaria que codirige la campaña Más Allá del Carbón del Sierra Club. “En 2010, los analistas esperaban que se retiraran 30,000 megavatios de energía de carbón durante la siguiente década. Pero en menos de tres años, la campaña casi ha duplicado estas predicciones, asegurando el retiro de más de 58,000 megavatios —más de un sexto de toda la capacidad energética carbonera del país y más del 25% de las plantas de carbón existentes. Por medio del activismo de base y del poder de personas apasionadas de todo el país, estamos dejando claro a la sucia y obsoleta industria carbonera que ya basta”.
La industria carbonera se enfrenta a múltiples amenazas, incluyendo los crecientes costos del carbón, el descenso de los precios de la energía limpia y una coalición de motivados activistas convencidos de abandonar el carbón. Además se las tiene que ver con la creciente exigencia nacional de confrontar la contaminación procedente de las plantas de carbón que causa la crisis climática, el pilar básico de la estrategia climática del Presidente Obama anunciada en junio. Cuando se instauren exigentes estándares de contaminación de carbono, esta plantas deben instalar modernos métodos de control de polución o completar el abandono de la combustión del carbón.
De hecho, mientras las compañías eléctricas se dan cuenta de que el carbón es una inversión cada vez peor, están haciendo la transición hacia fuentes limpias y renovables de energía, como la solar y la eólica. Hoy en día, Estados Unidos tiene instalados 60,000 megavatios de energía generada por el viento, suficientes para alimentar unos 15 millones de hogares. Texas produce tanta energía eólica, que si este estado fuera un país, sería el sexto generador del mundo. Mientras tanto, estados de todo el país ya se benefician de la energía renovable. En 2012, Iowa y Dakota del Norte recibieron más del 20% de su energía del viento, y nueve estados produjeron más del 10% de su electricidad gracias al viento.
Asimismo, este año, Estados Unidos se unió a otros tres países que cuentan con una generación de 10,000 megavatios de energía solar, la cual es la opción de mayor crecimiento en nuestro país. En estados como California, Carolina del Norte, Illinois y Nueva Jersey, la energía solar está creando empleos locales y ofreciendo energía limpia y económica. Este crecimiento de la energía limpia ha ayudado a crear más empleos en todo el país y actualmente cuenta con casi 200,000 trabajadores.
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