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Meryl Streep ha logrado triunfar en el difícil y competitivo mundo del cine sin verse involucrada en escándalos y anteponiendo su vida privada y su familia al glamour de Hollywood.
POR: AMNELLYS RIVERA
Mary Louise Streep, nombre de pila, nació en Summit, Nueva Jersey, el 22 de junio de 1949. Su padre era farmacéutico, y su madre, una diseñadora publicitaria, que junto a sus hermanos menores, Harry y Dana, formaban una familia muy acomodada. Le apodaron Meryl cuando se estrenó como actriz en el colegio a los ocho años de edad, y fue tanto su entusiasmo, que acabó matriculándose en la escuela de arte dramático del colegio universitario Vassar, estudios que amplió en la Universidad de Yale.
Muy grandiosa para sus papeles
Es una de las actrices más consagradas del momento y que seguirán en la memoria de los amantes de cine por siempre. Con 64 años de edad ya tiene en su estantería tres merecidos Oscar, más Globos de Oro que nadie en la historia, dos Emmy, dos premios del Sindicato de Actores, y un BAFTA, por lo que está considerada como una de las más talentosas.
Su versatilidad y personalidad camaleónica a la hora de interpretar no conocen límite al igual que su fuerza, soltura y garbo en películas como La decisión de Sophie, Memorias de África, Los puentes de Madison, La duda, Kramer vs Kramer, entre otras.
Demostró que no hay papel que se le resista, encarnando a un hueso duro de roer: representar en pantalla a Margaret Thatcher, la ex primera ministra británica, quien se ganó a pulso el apodo de “La Dama de Hierro”.
Aunque no pudo imitar la rara belleza de Thatcher, se echó al bolsillo otro Globo de Oro. Ahora destaca por su papel en Agosto, cinta que presenta a la familia Weston que se reúne con motivo del funeral del padre y en donde afloraran todos los conflictos y reproches soterrados por el tiempo.
A pesar de que ha tenido la versatilidad de haberse destacado en facetas como la comedia, ha sido reconocida más por sus papeles enigmáticos y de mujeres atormentadas, despechadas y echadas al olvido.
Ya sea de periodista, sindicalista, diseñadora artística, escritora, cocinera o monja amargada, esta rubia diáfana se "camuflajea" en la piel de cualquier tipo de mujer, no importa el acento, y sin grietas al actuar. Esto nos permite decir que, en resumidas cuentas, Meryl Streep es muy grandiosa para sus papeles.
Una vida estable como su carrera
Streep ha sido siempre una mujer discreta, y su lista de romances no es como la de sus nominaciones. En los años 70, convivió con el actor John Cazale, fallecido como consecuencia de un cáncer, con quien estuvo hasta el día de su muerte; aunque se rumoró que tuvo amoríos con Jeremy Irons, su compañero de reparto en The French Lieutenant's Woman.
Luego se casó con el escultor Don Gummer, con quien procreó cuatro hijos y lleva un matrimonio jubilado. Algo raro en el ambiente hollywoodiense, lo que puede que se deba a que residen en un rancho en Connecticut, alejados de la presión mediática.
Consecuente con esta actitud, no posa en revistas junto a sus hijos para decir lo buena madre que es, y rueda una película al año para pasar más tiempo con los suyos. No obstante, no ha salido ilesa del precio de la fama.
Y es que en varias ocasiones la han criticado, sobre todo cuando en los Critics Choice Awards la actriz Sandra Bullock le plantó un beso en la boca. No obstante, a esta rubia "oscarizada" todo le resbala. "¡Ya ni me acuerdo de a cuántas mujeres he besado!", manifestó en tono de broma.
Tal vez por la emoción le vuelva a dar un beso en la boca a Bullock si esta se llevara el Oscar o viceversa, ya que ambas están nominadas. No es para tanto, ni para que se le rompa el techo de cristal que celosamente ha protegido de los vientos de la fama.
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