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El músico argentino Gustavo Cerati, una de las figuras más reconocidas del rock en español, falleció en Buenos Aires a los 55 años tras permanecer cuatro años y medio en coma debido a un accidente cerebrovascular.
CON AMNELLYS RIVERA
Una de las glorias del rock latinoamericano, el argentino Gustavo Cerati, murió hoy en Buenos Aires cuatro años después de sufrir un accidente cerebro vascular que lo mantuvo desde entonces en estado de coma.
“Comunicamos que hoy en horas de la mañana falleció el paciente Gustavo Cerati como consecuencia de un paro respiratorio", aseguró en un comunicado publicado en la página oficial en Facebook de Cerati el Dr. Gustavo Barbalace, director Médico de la Clínica ALCLA, donde se encontraba hospitalizado.
"Les agradecemos el respeto y la consideración conque siempre acompañan a nuestra familia", aseguró su familia en Facebook.
El músico será velado a partir de las 21 horas locales (0 GMT) en la Legislatura Porteña de la capital argentina. Cerati dirigió la icónica banda Soda Stereo, uno de los grupos de música más populares de Argentina y América Latina.
Tras la separación de la banda que conformaba con Héctor "Zeta" Bosio y Charly Alberti, Cerati lanzó su carrera como solista. Soda Stereo se separó en 1997 por diferencias creativas y personales, aunque se reunió en 2007 para una última gira de despedida.
El 15 de mayo de 2010 el músico sufrió un accidente cerebrovascular y se desmayó después de un concierto que brindó en el campo de fútbol de la Universidad Simón Bolívar, en Caracas, Venezuela.
El cuadro que silenció a Cerati
El 7 de junio de 2010 llegaba a Argentina, concretamente a Buenos Aires, la ciudad que lo vio nacer hace 53 años, el cuerpo en coma del músico Gustavo Cerati.
Venía de Caracas, donde los médicos venezolanos hicieron todo lo posible por sacarlo del coma profundo en el que está sumergido desde entonces, fruto de un ACV casi letal, del que el artista ya había tenido serios indicios antes y contra el cual, según parece, no se pudo defender.
Es decir, para hacerlo, Gustavo, un fumador empedernido, un hombre que vivía prácticamente en los aviones, que dormía poco y se cuidaba menos, tendría que haber cambiado sus hábitos en forma rotunda. Tendría que haber dejado de dar conciertos públicos, sin duda no volar más y, en cierto modo, dejar de ser él.
Lo que a esas alturas era, como es lógico, bastante improbable. Dos años antes de su accidente cerebrovascular, Cerati había sufrido una tromboflebitis, una enfermedad circulatoria que él adujo a su tabaquismo y, sobre todo, al avión.
“Tuve un miedo bárbaro”, dijo en 2009, cuando visitó México para presentar lo que hasta la fecha constituye su último trabajo, “Fuerza natural”.
Estuvo durante un largo tiempo internado y estuvo de perder la pierna…
Las mujeres de Ceriati
Cómo buena estrella de Rock, Gustavo Cerati siempre estuvo rodeado de bellas mujeres, algunas de ellas, como parejas sentimentales y otras como parte de sus proyectos musicales.
Oficialmente Gustavo se casó con dos mujeres: la primera, Belén Edwards, con quien contrajo matrimonio en los inicios de su carrera con Soda Stereo, incluso, en algunas giras cumplió labores de vestuarista.
En 1993 Cerati se casó con la modelo chilena Cecilia Amenábar, madre de sus dos hijos, Benito y Lisa, de quien se separó en 2002.
Además, se le relacionó con modelos y otras cantantes como su polémica relación con Deborah del Corral, quien en la época de Soda Stereo fue novia del baterista Charly Alberti y a quien algunos medios sensacionalistas culparon del rompimiento del grupo, aunque su relación con Cerati en realidad no se dio sino hasta 2003, casi seis años después de la separación del trío.
Al momento del accidente cerebro vascular que lo mantienia en coma, Cerati salía con la modelo Chloé Bello, quien luego se buscó otra pareja.
Lo cierto es que no son pocas las leyendas sobre suplementos sexuales que habrían provocado los problemas de salud de Gustavo, según cuentan.
El pesimismo de la medicina
Tras años del derrame cerebral masivo que dejó a Gustavo Cerati totalmente inconsciente, en estado vegetativo, los médicos no hacían más que expresar su pesimismo y dar datos que llamaban objetivos y que descartaban la recuperación del cantante y compositor. C
uando un estado vegetativo se produce a causa de un derrame cerebral, es poco probable que acontezca ese milagro de las películas: un día, como si nada, el paciente despiertó y pidió café con leche y pan con mantequilla.
Los libros de medicina dicen que es más dable que ese milagro se produzca cuando la persona cae en estado vegetativo a causa de un trauma externo.
Mientras tanto, el diagnóstico médico de Cerati era desalentador. Lo que las hermanas de Gustavo y su madre llamaban rasgos de reconocimiento, eran en realidad signos propios del estado vegetativo en que se encontraba, dice la medicina.
Se despertaba y se dormía, algo que no sucede en el coma y por tanto tenia estímulos que podían confundirse con síntomas de una mejoría. Su caso, aseguraban los doctores, era similar al de la estadounidense Terri Schiavo –quien estuvo 15 años en coma hasta que su familia la desconectó- y al del ex premier israelí Ariel Sharon, quien se mantiene en estado vegetativo desde hace siete años, luego de sufrir un derrame similar al de Gustavo.
Los años pasaban. Gustavo Cerati padecía neumonía. Luego se anunciaba que había superado el cuadro. Gustavo Cerati era operado de un cuadro de hidrocefalia. Respondía a estímulos (térmicos), pero seguía sin despertar. Obtenía el Premio Gardel de Oro, el más grande galardón de la música argentina, pero fue incapaz de ir a recibirlo.
Las noticias sobre su estado comenzaron a disminuir en los medios, solo salian muy de vez en cuando. Su cuadro seguía siendo el mismo. Seguía sin despertar. El último parte médico sobre la salud Cerati, indicaba que el cantante se encontraba "clínica y hemodinámicamente estable, sin complicaciones agudas, manteniendo un buen estado nutricional y sin presentar lesiones por decúbito".
Agregaba que "neurológicamente no ha tenido cambios significativos y permanecía con asistencia ventiladora mecánica".
“Despiértame cuando pase el temblor”, reza una de las canciones más conocidas de la inmortal Soda Stereo. El temblor, o mejor dicho el cataclismo, que ocurrió hace cuatro años. La tierra debajo de los pies de Gustavo Cerati dejó de moverse y muchas lunas pasaron. Sin embargo, a pesar del llanto de los fanáticos, los clamores de su madre y las ansias de las mujeres que alguna vez amó, él nunca despertó…
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