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La agente que oficialmente no ha sido identificada como tampoco el hoy teniente, supuestamente acudió la semana pasada a la Oficina de Integridad Profesional en el Cuartel General y entregó el arma sometiéndose a la pesquisa que podría significar su expulsión de la Fuerza.
La mujer alegadamente señaló a quien era su supervisor hace un tiempo, que para la fecha de la filmación era sargento y hoy es teniente segundo, como la persona que grabó los momentos en los que ella le practicaba sexo oral. La grabación dura no menos de tres minutos pero fue cortada al ser subida a las redes.
Desde la semana pasada comenzó a circular, pero esta semana el video fue prácticamente visto por la mayoría de los agentes y oficiales al seguir diseminándose mayormente por la plataforma “WhatsApp”.
Aunque ayer corrió el rumor de que tanto la agente como el teniente tenían que comparecer al Cuartel General, para el mediodía por la falta de servicio eléctrico desde hace tres días, prácticamente cesaron todas las operaciones administrativas.
Las primeras versiones señalaban que el sargento había mantenido una relación sentimental con la joven mientras tenía sexo oral en horas de trabajo en un cuartel de San Juan.
La joven y el sargento terminaron la relación. El sargento, que según la joven agente fue quien filmó el vídeo con su teléfono celular, ascendió a teniente segundo y fue enviado a dirigir un precinto. Tras enterarse que ella tenía una pareja alegadamente despechado, el oficial que le lleva más de 15 años de diferencia en edad, había hecho público el contenido pornográfico de la grabación.
La joven agente alegó la semana pasada que nunca tuvo en su posesión ni control del vídeo.
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