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El gobernador Alejandro García Padilla recalcó hoy que los empleados del Departamento de Educación que estén involucrados en cualquier tipo de fraude “primeramente perderían su trabajo”, esto luego de que las autoridades federales allanaron diversas oficinas regionales de Cidra y Caguas.
“Si hay empleados implicados en un fraude, primeramente perderían su trabajo”, dijo el primer mandatario en un ceremonia de inicio de la construcción del desvío entre la carretera PR-155 y la PR-568, en Orocovis.
Agentes del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, siglas en inglés) y de la Oficina del Inspector General del Departamento de Educación de Estados Unidos allanaron ayer, martes, las oficinas regionales del Departamento de Educación (DE) en Caguas y Cidra en busca de documentos, informes y discos duros.
Sobre el particular, el secretario de Educación, Rafael Román Meléndez, admitió que conocía sobre la investigación realizada por las autoridades federales y que, hasta el momento, la agencia ha mantenido “comunicación y colaboración” con el secretario de Justicia, Luis Sánchez Betances.
El titular de Educación precisó, además, que lleva varias semanas colaborando con la Oficina de la Contralora, Justicia y las autoridades federales en torno a presuntas irregularidades en el uso de fondos federales para el otorgamiento de subastas de transporte escolar.
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