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La saga del desnudo de Kim Kardashian para Paper Magazine llegó a la TV. La modelo fue invitada a The Project, un programa de la cadena australiana Ten en el que uno de los conductores, Rove McManus, le preguntó si podía repetir en vivo la pose en la que sostiene una copa de champaña con su trasero o si la toma se trataba de “todo Photoshop”, en referencia al programa de diseño que sirve para retocar fotos.
Kardashian dudó un poco y ensayó una respuesta evasiva, ante lo cual McManus cortó por lo sano: colocó dos copas en la mesa y le propuso claramente recrear la pose.
“Ah ah, eh…” titubeó Kim ante el desafío.
“¿Es una posibilidad?”, inquirió el periodista. La cara de Kardashian dejó en claro que no tenía pensado enfrentarse a semejante desafío, por lo que McManus -en un estudiado paso de comedia- le dio la posibilidad de salvar la situación enseñándole cómo se hace.
Entonces, se dedicaron a la miniclase, por supuesto que fue un fracaso, en medio de las risas de todo el panel. La conclusión de Kardashian sobre el motivo por el que el delgado periodista no pudo imitar su “hazaña” es que le “faltaba masa”, en referencia a que el trasero de McManus no tenía suficiente tamaño como para sostener la copa.
La foto de Paper Mag que Kardashian tenía pautada. Los desnudos, según trascendió, fueron “por amor al arte”
La sesión del fotógrafo Jean Paul Goude cumplió el objetivo de “romper internet” la semana pasada y generó todo tipo de repercusiones, memes e imitaciones. Además, trascendió que la mediática -contra lo que se esperaba- no cobró ni un dólar por mostrar su cuerpo en la tapa de la revista.
Según declaró un representante de la revista a E!News, “estaba emocionada de trabajar con el fotógrafo francés Jean Paul Goude”. Al parecer, la esposa de Kanye West no tuvo planeado posar desnuda. “Kim llegó a la sesión de fotos con sólo la imagen de portada en mente: la de la champaña, porque Goude quería recrear esa famosa foto que él había tomado”.
“Jean Paul y Kim se llevaron bien y pidieron a todos que se fueran y ambos se pusieron creativos. No hubo publicistas, ni ejecutivos de la revista. Él tenía que estar inspirado primero y verla primero y tener una visión”, declaró una fuente al citado medio sobre la sesión de fotos que se realizó en septiembre durante la Semana de la Moda de París.
“Y así se le ocurrió eso: quitarle el vestido y a Kim le encantó. Ella estuvo dispuesta a todo en nombre del arte. El fotógrafo es icónico”, agregó la fuente.
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