<script async src="https://pagead2.googlesyndication.com/pagead/js/adsbygoogle.js?client=ca-pub-7302061392394882"
crossorigin="anonymous"></script>
El fulminante despido de la animadora Gricel Mamery del programa ‘Qué noche’, de Puerto Rico TV, ha levantado un sinnúmero de opiniones y mayormente a favor de la artista porque consideran injusto e innecesaria su salida. Esto como consecuencia de un suceso que protagonizó en las Fiestas de la Calle San Sebastián, del cual ella alegó “haber sido víctima de una broma, de la cual no tuve control”.
El miércoles pasado, EL VOCERO reveló unas imágenes captadas por el fotógrafo Eric Laguna, para la sección ‘En la mira’, en las cuales ella estaba divirtiéndose en el balcón de una habitación del Hotel El Convento, en el Viejo San Juan. En las mismas tiraba besos al público, se trepó en la baranda y se besaba con el chismólogo argentino Javier Ceriani, quien además le levantó la blusa dejando al descubierto su sostén.
Al día siguiente, el presidente de la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública, Pedro Rúa Jovet, anunció haberse reunido con Gricel y haber determinado entre ambos la culminación de la relación contractual entre ella y Puerto Rico TV.
“Aunque no descarto una futura colaboración con Gricel, estoy cancelando su contrato de manera inmediata”, indicó el ejecutivo mediante comunicado de prensa. Luego, él aceptó a Radio Isla 1320 que las polémicas fotos influyeron en su decisión de finiquitar el contrato porque todos los contratos de talento de la estación del gobierno, que es educativa y familiar, tienen una cláusula de desempeño e imagen pública.
En ese sentido, EL VOCERO, auscultó con el licenciado Roberto Prats sobre la posibilidad que tiene Gricel de tomar acción legal contra el canal.
“Eso conllevaría estudiar las cláusulas de terminación del contrato y si el canal cumplió con esas cláusulas. Típicamente un contrato de esta naturaleza permite alguna cancelación por cualquiera de las dos partes, pero no puede ser nunca una terminación caprichosa o arbitraria y mucho menos contraria a la ley”, explicó Prats, previo a enfatizar que de haberse cancelado sin cumplir lo establecido, ella sí tendría “disponible causas de acción y podría exigir el cumplimiento”.
El letrado restó importancia al suceso de las fotos, que al parecer llevaron a activar la alegada cláusula de desempeño e imagen pública.
“Lo que leí es que el contrato tenía una cláusula que requería mantener una imagen pública y ese es un criterio bastante amplio para una persona de una alta moralidad, pues los hechos como se dieron pudieron haber sido un acto que laceró su imagen pública. Creo que no constituía un problema de imagen pública y mucho menos sin ella haber tenido oportunidad de defenderse. Creo que hubo un arrebato de moralidad de 20 minutos y tomaron una determinación inmoral, peor que la que se le ha imputado a ella. Es una determinación que da impresión que tiene consecuencias legales que deben observarse”, añadió.
Por cierto, Gricel rompió el silencio sobre el asunto el pasado viernes mediante una comunicación escrita al programa mañanero ‘Gozando en la mañana’, que conduce junto a Raymond Arrieta por Fidelity, y al cual se reincorpora hoy con el apoyo de la estación y de la empresa Uno Radio Group.
En esa misiva, ella alegó estar “triste y apenada porque fui despedida injustamente de mi trabajo por ser víctima de una broma, situación de la cual no tuve control, no me lo esperaba y me tomó por sorpresa. He sido discriminada y esto me preocupa, ya que se crea un precedente peligroso no sólo para las mujeres en Puerto Rico, sino para todos los ciudadanos”.
“Conozco a la señora Mamery y tengo la más alta estima de ella antes, durante y después de los hechos. Me parece que fue víctima de un bufón, que hizo una actuación que no debió haber hecho. Si lo hubiese hecho un hombre que tendría contrato, las consecuencias hubiesen sido diferentes, no es una acción que hablara bien de WIPR”, enfatizó Prats.
En cuanto a si la acción es discriminatoria por ella ser mujer, dijo que “eso requiere indagar como se interpreta imagen pública”.
Ray Cruz le da opción a Gricel
De otro lado, Ray Cruz, quien hasta el pasado diciembre presidió la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública, coincidió con la determinación de su sucesor.
“Sí hubiese tomado la decisión de Pedro Rúa, no se trata de un canal privado sino del canal educativo del gobierno”, apuntó.
Sin embargo, le sugirió a Gricel hacer una querella ante la Policía sobre los actos que cometió Ceriani contra su persona y sin su consentimiento para que el canal reconsidere la determinación.
“Todavía está a tiempo, debe ir a la Policía. Ella hacía buen trabajo, es muy buena animadora. Si fuera un canal privado le hubiese dado la oportunidad, pero es el canal del gobierno que todo el mundo está mirando. Si fue víctima debe hacer una querella e ir hasta lo último con eso porque sería suficiente para demostrar que no fue deseado y no hay razón para que la saquen del canal 6. Con esto debe dar a respetar a otras mujeres que pasan por situaciones como éstas y no denuncian a los hombres. Ella debe ser un ejemplo, mientras no denuncie esta falta de respeto, está siendo cómplice de Ceriani”, finalizó.
<script async src="https://pagead2.googlesyndication.com/pagead/js/adsbygoogle.js?client=ca-pub-7302061392394882"
crossorigin="anonymous"></script>
