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Por Patricia Vargas Casiano
Cuando la productora Martiza Casiano tenía 14 años tuvo su primer encuentro con Dios en la Iglesia Bautista. En ese momento estaba acompañada de su mamá, Dámaris Cain, quien provenía de una familia judía.
“A partir de entonces empecé a estudiar la Biblia, me parecía un libro de historias fascinantes más complicadas y dramáticas que las de la la vida actual. Llegué a una parte del Nuevo testamento donde Jesús decía a sus discípulos que predicaran y que su palabra se dispersara por el mundo. Así las cosas casi 40 años después me senté a pensar como hacía para lucir bien y llevar a cabo todo esto y estar bien con Dios”, sostuvo Casiano.
Las ideas fluyeron y en octubre nació Jesus Christ Wear & Accessories. Una empresa que incluye ropa de mujer (vestidos, blusas y mahones), polos para hombres, ropa de niños. Además, de bisutería como cadenas con colgantes que resaltan el logo de la compañía inspirado en Jesús con los brazos extendidos y un envase que contiene aceite ungido. También zapatos con el mismo logo y carteras cuyo cierre está formado por una V, que significa victoria, y artículos para la casa como juegos de colcha.
La peculiaridad de todos estos artículos es que llevan escrito el Padre nuestro, el Salmo 23, los Diez mandamientos y “No juzgues para no se juzgados de Mateo 7,1-5 y muchos otros pasajes bíblicos.
Recuerda la productora que al caer en la vorágine del mundo la farándula se alejó de Dios.
“Tuve mi segundo encuentro en el 2004, cuando a mi hijo Aaron de 9 años le diagnosticaron autismo, y entro en un túnel sin luz. No existía, ni a nivel gubernamental ni privado, quien me diera la mano y me ayudara con las herramientas a entender la condición de mi hijo, no existían en esa época aquí. A mi manera comienzo mi transformación y la de mis hijos”.
Afirmó Martiza que tuvo que luchar contra detractores por en ese momento contar con el 70 % de las producciones que se celebraban en el país. La condición de su hijo y una hija, Agatha que ahora tiene 20 años, que exigía la atención de su madre.
“Que yo esté viva y sana se lo debo a Dios. Tuve que luchar con todo a la vez y la crueldad de mucha gente que no entendía porque me estaba alejando del ambiente artístico y la debacle económica mundial. Artistas que practican la fe cristiana prefirieron darme la espalda porque mi asunto era complicado. Confiaba en esas personas, le dí todo por décadas y mientras le serví todo estaba bien, fue duro”.
El tercer encuentro con Dios fue hace año y medio con la pastora Wanda Rolón y surgió la idea de un centro de capacitación de autismo hacia donde van dirigidos el 90 % de los recaudos de las ventas de los artículos y el otro 10 % a las iglesias que han obtenido los artículos para vender a sus feligreses.
“Con todas esas cosas le hago un homenaje a Cristo por la tolerancia, la fe y el amor que me ha dado para seguir adelante. Llevo la palabra de él como quería hacer de pequeña y de la mejor manera es a través de esos artículos. Esto acaba de empezar porque esperábamos los permisos del gobierno federal. Estamos en las redes sociales para que la gente pueda comprar, distribuir y hacerse vendedor”.
La ayuda de Barbara Bermudo
Para este proyecto, Maritza a contado con la ayuda de la presentadora de “Primer impacto” Bárbara Bermudo.
“A través de Bárbara, que es mi amiga y es cristiana, se está desarrollando un gran sistema de iglesias y concilios que están interesados en distribuir la mercancía en México, Panamá, España, China, Brasil e India. Además, estoy en negociación con una de las grandes cadenas de tiendas por departamentos de Estados Unidos que quiere abrir una sección especial para atraer el mercado cristiano”.
Según Maritza, gracias a grandes firmas del país que han puesto a sus manufactureros en China al servicio del desarrollo de esta firma ha logrado calidad en sus productos.
“Tenemos la misma calidad de productos de las mejores diseñadores, las mejores sábanas, suéters, mahones y carteras. Espero que para la Semana Santa el próximo año sea el lanzamiento mundial, y que por fin se logre el sueño de crear el primer centro de capacitación de este tipo”.
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