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Por Brenda Peña López
Victoria Samari Medina Reyes, de 4 años, cabalgaba y bailaba hoy feliz sobre su caballito de palo azul turquesa y fucsia, cada vez que en el estacionamiento del Coliseo Mario Quijote Morales en Guaynabo, sonaba el tema popularizado por el merenguero Joseph Fonseca, llamado igual que la tradicional artesanía puertorriqueña.
La pequeña, que se encontraba junto a su madrastra, María I. Zayas, y su hermana paterna de 3 años, fue una de las cerca de 2,000 personas que aceptaron el reto del cantante de superar la cifra de 2,571 asistentes bailando sobre sus caballos de palo y establecer un nuevo récord Guinness.
“Es que su abuelo tiene caballos y a ella le encantan”, expresó Zayas, quien viajó desde san Lorenzo para “apoyar esta causa y a Joseph Fonseca”.
La meta principal no pudo completarse. El esfuerzo de Fonseca se quedó corto al congregar a solo 1,950 personas hasta las 5:00 p.m. La meta del artista era llegar a las 3,000.
Sin embargo, la actividad sirvió para recaudar dinero para el cáncer pediátrico. Según se informó, la actividad recaudó sobre $75,000 con la venta previa de caballos de palo a través de las 24 Cooperativas Unidas Pro Niños con Cáncer en Puerto Rico (CoopCAP) y los supermercados Mr. Special y los que se vendieron ayer.
El entusiasmo era evidente desde temprano en la tarde, cuando la organización World Guinness Récord comenzó a contar los caballos de palo, todos confeccionados por artesanos del patio.
Otra niña que bailó hasta el cansancio junto a su caballito gris y rosa claro fue Thailanys Fontánez, quien asistió al evento con su papá, José Fontánez.
“La traje porque a ella se pasa bailando sola y le encanta esa canción”, expresó el joven padre, residente en Caguas, sobre el pegajoso tema.
“Estoy aquí con mis hijos porque esto no se ve todos los días. Yo quiero poder contarles algún día a mis nietos que rompí el récord Guinness montando el caballito de palo. Además mi nena es loca con la canción”, expresó por su parte, Michelle Wittberg, sin anticipar que el récord no se rompería.
Aunque el resultado no fue el esperado, el cantante, gestor del A Caballito de Palo Joseph Fonseca World's Fest, agradeció el apoyo y la asistencia de los presentes. Mientras destacó que “lo importante es que se hizo un esfuerzo, que en Puerto Rico se pueden hacer grandes cosas, y que se pudo recolectar ese dinero para los niños con cáncer, los Centros Sor Isolina Ferré y el Hogar Ruth” de mujeres víctimas de violencia doméstica.
Pero el ánimo de la gente mermó una vez se anunció que el récord no se logró y las personas comenzaron a marcharse en grupos. Solo unos pocos se quedaron hasta que terminó la presentación musical de Fonseca en tarima.
El intérprete de “Que levante la mano”, por otro lado, resaltó que además del dinero recaudado, el festival sirvió para brindarle taller a los artesanos puertorriqueños que se dedican a la confección de caballos de palo.
“Nunca en la historia de Puerto Rico los artesanos de Puerto Rico habían vendido tantos caballitos de palo. Se han vendido 4,700 caballitos de palo (para esta causa)”, indicó Fonseca.
La artesana barranquiteña Carmen Jiménez aseguró que para la venta a través de las cooperativas y supermercados había preparado unas 950 piezas. A esas suman alrededor de 50 que vendió hoy durante la actividad, para alcanzar los mil caballos vendidos.
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