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Tener ética laboral en el periodismo de farándula le ha costado a Papo Brenes más de un sufrimiento. Pero el panelista de Dando candela (Telemundo) no se arrepiente ni un solo segundo de haber rechazado chanchullos, ofertas jugosas y posiciones de poder, no solo por su satisfacción personal, sino porque esa manera de pensar y actuar ha cosechado frutos en sus dos hijos varones.
Marcos Brenes Morales es el director de prensa del Departamento de Recreación y Deportes (DRD) de Puerto Rico, mientras que Josué Brenes Morales es asesor de Desarrollo Económico, la Compañía de Fomento Industrial y la Comisión de Hacienda de la Cámara de Representantes.
Aunque sus trabajos están relacionados con el Gobierno y no con los espectáculos, ambos agradecen a su padre por ser un ejemplo de fortaleza ante la tentación de “venderse” a algún interés particular.
“En la farándula, hay gente muy buena, gente seria, en un mundo lleno de limitaciones, con pocas oportunidades de trabajo; es una selva en la que la necesidad los obliga a ser diferentes de lo que son. Yo escogí seguir siendo quien soy, quedarme con mis valores, mis principios”, expresa Ramón Luis Brenes Berríos, su nombre real, tras echarse una jugada de baloncesto con sus vástagos.
“He renunciado a lugares donde he visto cosas incorrectas y donde no está la verdad. Es cierto que me ha traído dolores de cabeza, tropezones, perder oportunidades, pero yo creo que la verdad siempre gana. Y si tuviese que volver a renunciar cuando vea algo que no está correcto, lo haría otra vez”, añade el periodista de 60 años de edad ante el asentimiento de Josué y la mirada atenta de Marcos.
Los tres coinciden en que la política no es tan distinta de la farándula, tanto adentro como afuera.
“Hemos dejado trabajos más lucrativos. En mi caso, soy independentista, pero sé que mi jefe (el secretario del DRD, Ramón Orta) es superbueno. El deporte nos une a todos como pueblo y yo trabajo en esto porque creo en esto”, expresa Marcos, de 32 años, al recordar que, en su caso, el actual gobierno del Partido Popular Democrático (PPD) ha cumplido su promesa de contratar talento que no necesariamente es afín a sus ideales partidistas.
De hecho, el deporte también los une a ellos tres, mucho más que la política o el periodismo. Aunque Papo es más diestro en el béisbol, le mete al baloncesto con sus hijos.
Sobre las ideologías, el periodista aclara que él también es independentista y que no entiende por qué lo vinculan con el PPD simplemente porque tuvo un noviazgo con la ex senadora Sila Mari González, hija de la ex gobernadora Sila María Calderón.
Ahora bien, Josué sí es “popular hardcore”, como él mismo se identifica. Sin embargo, trabajar para el partido al que es fiel no implica que se vuelva ciego por el fanatismo, otra enseñanza de su padre.
“Si no fuera por el balance que me enseñó mi papá, quizás no pudiera distinguir cuando las personas están en acciones inescrupulosas”, afirma el estratega de 35 años.
Además, de su progenitor ha adquirido la elegancia para manejar los temas del corazón, método que ha puesto en práctica cuando algunos periodistas muestran más interés en la vida de sus clientes que en sus planes sociales y económicos, narra Josué.
Clave la humildad
Los hijos de Papo señalan, asimismo, que parte de su código de valores es recordar que provienen de Puerto Nuevo, en San Juan.
“Eso es algo que yo le admiro a papá, que nos ha enseñado a ser así. Tú lo puedes ver en una mesa de un restaurante con un gobernador y al rato en la barra del barrio, y tú vas a ver que trata con el mismo respeto y amabilidad a todos los que estén con él”, describe Marcos.
Para el director de prensa del DRD, su padre también representa la persona que estuvo a su lado cuando tuvo que abandonar su carrera baloncelística como consecuencia de una lesión. “Es un padre amoroso. Siempre han estado ahí sus consejos, su dedicación”, anota Marcos y Josué lo secunda.
Papo Brenes acepta esas flores con un poquito de pachó, sin dejar pasar que también tiene una hija, Angelique Brenes Veiga, de 17 años, quien vive en Carolina del Norte.
“Esta también va a ser periodista. Es tremenda comunicadora y lectora, y es bien estudiosa”, detalla el orgulloso papá.
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